«A las puertas de un nuevo fin de semana»
Se van sucediendo los días, el tiempo transcurre, no para. Podemos tener la sensación de que en ocasiones pasa muy deprisa (ya estamos a viernes!!!) o que pasa muy despacio (uff, por fín es viernes). Nuestra percepción del tiempo depende mucho de nuestras emociones, porque el tiempo siempre es igual.
Hoy es viernes y se acaba la jornada laboral, pero, ¿en serio?. No, porque o bien nos hemos quedado al paro, no tenemos trabajo, hemos tenido que cerrar nuestro negocio, estamos en un ERTE. Son sólo unos pocos los privilegiados que pueden seguir trabajando, trabajando desde sus casas, confinados, por teletrabajo, o los estudiantes, aquellos que pueden acceder a las clases online o que realizan sus trabajos desde casa con las pautas del profesorado. Para ellos sí puede tener sentido el que sea hoy viernes. Pero, ¿y aquellos que no tienen descanso, que trabajan sea el día que sea, y las horas que sean necesarias?
Vivimos momentos «extraños», a los que no estamos habituados, y que requieren no sólo una adaptación individual sino una adaptación global, social, conjunta.
Si, es viernes, ¿pero qué viernes?. Sea cual sea, mantente centrado en tu día, en lo que hasta ahora has construido, y vive. Al fin y al cabo es viernes.