» Y damos comienzo al mes de abril» «En apoyo a las víctimas ocultas del COVID-19»
Ayer, muchas partes de España amanecieron nevadas. Parece que el tiempo también nos indica que permanezcamos en casa.
Con el comienzo de un nuevo mes, afloran los recuerdos de otros años, y se hace más patente el tiempo que llevamos confinados.
No obstante, si éste confinamiento nos empieza a pesar, si dirigimos nuestra mirada a todas las personas que están haciendo posible que ésto dure lo menos posible, quizás seríamos mucho más conscientes de que debemos mantenernos firmes y continuar hasta el final.
Como profesional experto en crisis y emergencias, es mi deber hacer más clara la labor de estos otros profesionales que están en «primera línea de batalla». El personal de primera respuesta (personal sanitario: personal de ambulancias, médicos, enfermeros, auxiliares; policías, guardia civil, personal de defensa civil, militares,…) son víctimas ocultas que de alguna u otra forma se afectan ante una situación de emergencia sanitaria como la que estamos viviendo.
El tipo de trabajo que realizan, los expone a demandas extraordinarias de tiempo, a condiciones especiales propias del trabajo y a emociones intensas por su labor con personas en situaciones difíciles. Parte de su trabajo consiste en la posibilidad de enfrentar experiencias laborales intensas, excesivo sufrimiento humano, incidentes de causas múltiples, muertes, escasez de materiales y la falla en su misión.
Todas estas condiciones, propias del trabajo de primera respuesta, pueden producir una serie de reacciones físicas, emocionales, conductuales y cognitivas que potencialmente pueden interferir, en las habilidades para actuar en el lugar de las operaciones en forma inmediata, en el posterior retorno a la rutina laboral y familiar, o experimentar síntomas que se reflejan en una interacción negativa con el lugar de trabajo, el equipo y los enfermos a los cuales tiene que atender: este es el estrés del personal de primera respuesta.
El grado de afectación inmediato suele ser mayor a Nivel Emocional, seguido del Nivel Físico y Cognitivo.
Es importante tener en cuenta el impacto en la salud bio-psico-social de los equipos de primera respuesta. Que se les proporcione la ayuda psicológica necesaria para hacerle frente.
Y no sólo durante el momento en el que están actualmente inmersos sino también transcurrida la pandemia y el retorno a nuestra normalidad. Puesto que las situaciones vividas de estrés acumulado pueden haber afectado a su salud general.